Las Alergias y los niños

P

odemos conceptualizar  la alergia como una hipersensibilidad a alguna sustancia que, al entrar en contacto con el organismo a razón de  inhalación, consumo o contacto generara en el niño una reacción particular por lo que es bueno aclarar que la intensidad de la molestia va desde leves presentando destilación en las fosas nasales (presencia de moco liquido) hasta graves al dificultar en el menor la posibilidad de respirar.

La mayoría de las alergias que aparecen en el verano se deben a picaduras de insectos, mayormente pulgas de perro, gatos u otras mascotas del hogar las cuales hacen que el area de la picadura se observe enrojecida y presente prurito (picazón).

Muchos niños desarrollan estas alergias genéticamente, y el prurito que parece en la piel se agrava al consumir ciertos alimentos con efectos alergénicos.

Entre los alimentos que intensifican la alergia se encuentran principalmente los cítricos como las fresas; golosinas, chocolates, alimentos o bebidas con colorantes debido al contenido de tartrazina, algunos cereales, zapallo, espinaca, huevo de pollo. Sin embrago, se debe precisar que cada organismo reacciona de manera particular a cada alimento potencialmente alergénico.

Las alergias son de diferentes tipos:

• Alergias a los Alimentos
• Alergia a picadura y mordedura de insectos
• Alergias a partículas transportadas por el aire
• Alergia a los  medicamentos
• Alergia a las sustancias químicas

Si tu niño ha sido diagnosticado de alguna alergia recuerda que DEBES EVITAR AQUELLO A LO QUE EL MENOR ES ALERGICO es decir si su alergia es alimentaria enseñale al niño a no consumir los alimentos que le ocasionen daño y que sea consiente de esto asi el podrá dar a conocer en el jardín, colegio o en el medio donde se encuentre que NO debe consumir estos alimentos.

En el caso de las picaduras y mordeduras de insectos es recomendable usarlos repelentes para ahuyentar a estos animalitos.

Si la alergia es a partículas que se encuentran en el aire no permitas que tus mascotas entren en algunas habitaciones, por ejemplo en tu cuarto, y báñalas frecuentemente  si es necesario. Retira las alfombras, alfombrillas o moquetas de tu habitación (las superficies duras no acumulan tanto polvo como las almohadilladas). No cuelgues cortinas voluminosas y deshazte de los objetos que tienden a acumular polvo (como peluches, tapices y similares). Limpia frecuentemente (¡si tu alergia es grave, es posible que te libres de hacer la limpieza!) Si tu niño es alérgico a los ácaros del polvo, utiliza fundas especiales para cubrir las almohadas y colchones. Si eres alérgico al polen, mantén las ventanas cerradas cuando la polinización esté en su máximo apogeo, cámbiate de ropa cuando llegues a casa después de estar al aire libre — y no se te ocurra cortar el césped. En caso que el menor sea alérgico a  al moho, evita los lugares húmedos, como los sótanos, y mantén limpios y secos el cuarto de baño y otros lugares donde se suele formar moho.

NO DEBES OLVIDAR que las Alergias son tratadas,  razón por la cual al observar características en tu niño de este mal es recomendable que visiten al alergólogo o alergista quienes son especialista en la materia y te indicaran los medicamentos en sus diferentes presentaciones que debes de utilizar con tu niño